La clave del proceso fue tratar de encontrar la geometría capaz de resolver por un lado dotar de las mejores vistas y orientaciones a todas las estancias y por el otro lado resolver la implantación del volumen en la pendiente existente de la parcela sin realizar grandes movimientos de tierras.

En la solución propuesta se trabaja inicialmente con un conjunto de dos volúmenes lineales que se disponen perpendiculares a la pendiente, orientando su lado largo hacia el eje diagonal SE sobre el que se abren las vistas al mar. Las piezas construidas se van adaptando a la geometría en planta del solar de manera natural tomando contacto con el terreno por medio de planos aterrazados.

La casa se revira adaptándose al desnivel y buscando la vista al mar ,  destacan las celosías verticales de las mallorquinas que descomponen el volumen y dinamizan la imagen, estas celosías resuelven la protección solar de los paramentos vidriados de mayor magnitud del edificio. Los nuevos muros y volúmenes se resuelven con mortero monocapa blanco con acabado liso,  el resto de muros aterrazados en contacto con el terreno y la piscina se resuelven con piedra del lugar.

Sitges, Barcelona l España

Arquitectos Francesc de Paula García Martínez, Ana Gil Collado y Francisco Miravete Martín

Arquitecto Técnico Eduardo Ferrer Domenech

Fotógrafo Diego Opazo