La volumetría, la edificabilidad, los parámetros urbanísticos definidos por las normativas particulares para esta zona, junto a la premisa de conseguir una tranquila integración y un aprovechamiento máximo de las condiciones de la parcela y su orientación, dan como resultado un vivienda llena de matices, un conjunto complejo de volúmenes puros, con un tratamiento muy cuidado de las fachadas según su orientación y vistas, con un diseño renovado en la composición de carpintería, protecciones solares y en la elección de sus materiales.

La vivienda se soluciona básicamente en dos plantas, planta 0 y planta 1. En la planta 0, donde se produce en acceso principal al edificio se disponen las piezas de los dormitorios, es la plana a la cota más superior de la parcela, goza de las mejores vistas. En planta 1, se dispone en estar, la cocina y el comedor, es la zona pública de la vivienda, a una cota intermedia, se relaciona por medio de terrazas cubiertas y descubiertas con el resto de la parcela, en este nivel se dispone la piscina también. Existe otro nivel inferior, calificado con las ordenanzas municipales como sótano (Planta 2), donde se disponen estancias anexas a la vivienda. Gimnasio, bodega, zona de proyección, almacén, instalaciones,…

La volumetría del edificio es clara y sencilla, destacan las celosías verticales de las mallorquinas que descomponen el volumen y dinamizan la imagen, estas celosías resuelven la protección solar de los paramentos vidriados de mayor magnitud del edificio. Los nuevos muros y volúmenes se resuelven en acabado continuo blanco con acabado liso, el resto de muros aterrazados en contacto con el terreno y la piscina se resuelven con piedra tosca del lugar.

Jávea, Alicante l España

Arquitectos Francesc de Paula García Martínez, Ana Gil Collado y Francisco Miravete Martín

Arquitecto Técnico Eduardo Ferrer Domenech

Fotógrafo Mano de Santo